El OVNI olvidado de Gloria Swanson

 La inolvidable Gloria Swanson en El creúsculo de los dioses

Si algo le gusta a la ufología es enterrar los casos que resultaron un fiasco, mejor no airearlos y dejarlos en el limbo quedando como parte de la leyenda, haciendo creer que cuando el río suena agua lleva.

En enero de 1957, la actriz Gloria Swanson y un grupo de amigos se enteraron de que una nave espacial había aterrizado en las colinas de Hollywood. Así que se fueron caminaron por el barro y la oscuridad de la noche a una zona de Lakeridge Road. En un agujero poco profundo al final de su caminata, se encontraron con un disco de unos 3 metros y medio de diámetro, que supuestamente había derribado un poste de luz en el aterrizaje. Los asientos de la cabina estaban tapizados en cuero de coral, y dos cables eléctricos colgaban a los suelos de madera.

Suele omitirse lo sucedido posteriormente. Hasta allí se acercó el 24 de enero el periodista Dewey Linze especializado en temas aeronáuticos de Los Angeles Times. Tras comprobar que el platillo volador carecía de motor y controles interrogó a los vecinos, explicándole que la nave extraterrestre era una pieza descartada del decorado de un documental que se rodaba en la zona.

A veces cuando te dicen que si el río suena agua lleva es sólo para venderte algo.

Dewey Linze frente a la nave extraterrestre

Francisco Máñez