domingo, 25 de septiembre de 2011

Cuando los OVNIS se hacen invisibles

Si los especialistas aeronáuticos hicieran un mínimo caso a los testigos OVNI, los secretos militares no serían tan secretos, pero la cortina extraterrestre está tan bien extendida, que todos dicen haber visto una nave alienígena y nadie dice haber visto un aparato humano. Cualquier cosa que no vuela como un avión, o presenta un aspecto extraño en el cielo, tiene que ser por necesidad algo de otro mundo.

La famosa invisibilidad electrónica "stealth" acoplada hoy en día, por ejemplo, a los aparatos F-117 y B-2, es muy importante para comprender cómo pueden desaparecer las supuestas naves extraterrestres del radar. Sin embargo, para la ufología, el tema de la invisibilidad física es tal vez más interesante, pues una buena cantidad de testigos afirman en sus declaraciones que algunos OVNIS han aparecido, o desaparecido, delante de ellos, ya fuera de golpe o poco a poco. También otras personas vieron extraños OVNIS transparentes, o que en un momento determinado se volvieron traslúcidos.

De nuevo, los intentos realizados para fabricar aeronaves invisibles al ojo humano son tan viejos como la propia aviación militar, y se han probado curiosos sistemas. A principios del siglo XX se intentaron fabricar aviones invisibles en diversos países, o, dicho con mayor propiedad, difícilmente visibles. Al principio se usó celuloide transparente por completo para construir el aparato, prescindiendo de la armadura y el motor. Pero este material aumentaba en unos 25 kilos el peso de los monoplanos y en 40 el de los biplanos, siendo, además, sumamente frágil.

Los alemanes, en la Primera Guerra Mundial, utilizaron un nuevo material mucho más ligero llamado “fellón”, elaborado con una mezcla de celulosa y ácido acético enteramente transparente. La superficie visible del nuevo aparato no excedía de los tres o cuatro metros cuadrados, en lugar de los 30 o 40 presentados por los tradicionales. Los ensayos realizados con ellos resultaron muy satisfactorios, pues a una altura de 400 metros apenas podía distinguirse el aeroplano.

Un siglo más tarde seguimos trabajando en lograr la invisibilidad física para los aviones. Hoy existen metales transparentes de propiedades sorprendentes, y se han realizado pruebas interesantes con focos que intentan imitar la luz ambiental, dificultando, no sólo, la visión de las aeronaves, sino también la detección óptica de los mísiles antiaéreos.

No obstante, el programa técnico más llamativo dedicado a la invisibilidad física, apareció bajo el nombre en clave de "Ivy". En 1995 se comenzó a hablar de hacer invisible un fuselaje, mediante materiales especiales y cargas electrónicas de pequeño voltaje, que cambiarían el color del avión adaptándose a su entorno al modo de un camaleón, o mostrarían una imagen del paisaje que le rodea dificultando extremadamente su observación. Las personas que tengan más edad, recordaran que, esta aparente novedad, ya apareció en los años 60 asociada a trajes especiales para hacer invisibles a los soldados. Los más jóvenes la han visto plasmada en el cine en la película “Depredador”, protagonizada por Arnold Schwarzenegger, si bien, irónicamente, la usa un extraterrestre. Y es que muchas veces nos muestran ciertos temas como novedades de última generación, cuando se comenzó a trabajar en ellas hace décadas.

Esta tecnología, en su día secreta y negada a toda costa por los escépticos, hoy no es ningún misterio. En el programa de radio “Protagonistas”, dirigido por Luis del Olmo, del 24 de junio de 1999, en la sección de noticias de las ocho de la mañana, el locutor informó del descubrimiento de esta tecnología por parte de un investigador español. Y tres años más tarde, el 14 de agosto de 2002, el diario ABC afirmaba que la empresa France Telecom había presentado una “pantalla dúctil, mezcla de tejido de hilos textiles clásicos con fibra óptica en el salón Avantex 2002, celebrado en Frankfurt”. El nuevo material se comercializará en los próximos años, y nuestra ropa podrá cambiar de color a voluntad de su dueño, o mostrar la imagen que deseemos.

En el mismo número del ABC, también se informaba del tejido Luminex. Una tela capaz de emitir luz en diferentes colores, desarrollada por dos empresas italianas y una suiza, tras treinta años de investigación.

Crear un sistema que consiga hacer un objeto imperceptible al ojo humano, no consiste, únicamente, en fabricar un cuerpo transparente por completo, sino en que simplemente no lo podamos ver. El proyecto aeronáutico Ivy, es un buen ejemplo de esta invisibilidad obtenida de un modo inesperado. Teóricamente a un piloto le bastaría con conectar el nuevo sistema de camuflaje visual, y el aparato adoptaría los colores o el aspecto general de su entorno, desapareciendo de la vista de los testigos.

La invisibilidad ya no es un secreto:


4 comentarios:

  1. Buen trabajo, Paco Máñez. Al final todos los casos de presuntos OVNIs resultarán explicados. Siga así. Saludos.

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  2. Muchas gracias. Seguiré en ello :)

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    1. E encotrado un link de una empresa que esta costruyendo. Uno y parece que. Vuela con tecnologia tesla.

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  3. Buenos dias Paco Mañez, director del blog La Cara Oculta de los Ovnis. En un documental titulado POLICIAS Y OVNIS de la serie Cazadores de Ovnis -Bill Birnes y cuadrilla de ufólogos- vi que unos agentes de aviacion de aduanas de Estados Unidos habian grabado con detector de infrarrojos un aparato volador invisible al ojo humano. Al profundizar en el caso encontraron dificultades para identificar el OVNI con un helicóptero, quedando al final como NO IDENTIFICADO; pero no porque fuera invisible a la vista -que es lo que más me llamó la atención- sino porque no consiguieron explicarlo como helicóptero debido a la disposicion del rotor trasero (decían si mal no recuerdo que así no podia volar un aparato). En cambio, en unlibro de aviación de mi novia que es azafata italiana de la compañia ALITALIA vi que sí que existen esos aparatos -pequeño tamaño con rotor trasero en plano vertical (no en lateral) y pegado al fuselaje para ayudar al empuje hacia adelante del objeto aéreo- que les llaman GIRONDINOS aunque creo que en España se llaman giraplanos o helicoches. En fin, es igual, que debido a un espacio aéreo de aduanas un sistema de invisibilidad seguro que muy caro economicamente podían costearlo por ejemplo traficantes de sustancias estupefacientes. Pero, digame si es tan amable, Paco Máñez ¿Cómo es posible que unos investigadores de Ovnis famosos e internacionales sean capaces de meter la pata de esa manera? De dar por OVNI un caso -no por ser invisible sino porque no podia ser un helicóptero- cuando cualquiera con algo de sentido comun sabe que hay por ahi un montón de cosas de origen humano volandosobre nuestras cabezas. Adios.

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